Los gatos dividen su actividad diaria en 3 acciones básicas: comer, jugar y dormir. Su temperamento tranquilo, y su necesidad de alejarse de todos aquellos aspectos que les generan estrés, son el principal motivo de que así sea. Por ello, te será fácil detectar rápidamente si tu gato está enfermo, ya que alguna de estas 3 acciones básicas se verá alterada.
SÍNTOMAS DE UN GATO ENFERMO
Los gatos enfermos suelen modificar su comportamiento (duermen más, comen menos, y muestran inactividad o apatía). Cuando esto va unido a otros episodios, tales como vómitos o diarreas que superan las 24 horas, es necesario acudir al veterinario para que lo explore y determine las posibles causas. El veterinario le tomará la temperatura y determinará si tiene fiebre, cuando ésta exceda de los 39,4°C. También tendrá en cuenta si su abdomen está hinchado, y te preguntará si has observado variaciones en su orina (frecuencia o sangre), o un esfuerzo excesivo a la hora de defecar.
El aspecto de su pelaje (opaco o sin brillo) es otro de los síntomas que pueden orientarte hacia la aparición de una patología, al igual que la pérdida gradual de peso, o la alteración de su condición física habitual.
También debes prestar especial atención a la inclinación de su cabeza, o a la sensación de que deambula como desorientado. Estas señales podrían ser causa de problemas de índole neurológica, o patologías asociadas al oído / respiración, que en ocasiones también ocasionan que tu gato presente secreción ocular, o presencia de mucosidad.
OTROS SÍNTOMAS DE ALERTA
- Arcadas reiteradas: pueden ser debidas a obstrucciones en el estómago, esófago o intestino, e incluso a alguna enfermedad renal.
- Aliento maloliente: normalmente, está vinculado a problemas de salud dental (encías u infecciones). Bebe agua en exceso: el motivo de mayor preocupación podría ser la aparición de diabetes, aunque también puede ser que tu gato esté deshidratado o desnutrido.
- Aspecto de las heces: sobre todo, si observas que éstas son más secas, contienen parásitos, o presentan un aspecto más líquido del habitual.
- Se rasca o lame más que de costumbre: en este caso, hay que descartar la presencia de parásitos, u otras patologías comunes asociadas a la piel y estacionalidad (dermatitis, alergias).
- Irritabilidad o agresividad: puede deberse a motivos tanto físicos (dolor, picor, malestar) como psicológicos, ocasionados por factores externos (estrés, ansiedad, inquietud).
¿QUÉ HACER CUANDO UN GATO ESTÁ ENFERMO?
Además de visitar al veterinario si identificas alguna las señales mencionadas, recuerda que es muy importante que palpes el cuerpo de tu gato de forma periódica (sobre todo, abdomen, y mamas en el caso de las gatas), con el fin de asegurar que no se ha generado ningún quiste o protuberancia. En el caso de que así fuera, deberás acudir al veterinario lo antes posible. La detección precoz es la vía más eficaz para prevenir el desarrollo de enfermedades de mayor gravedad y consecuencias.
1. Estudia su aspecto general
Cuando algún gato está enfermo, muy frecuentemente muestra un estado general decaído. Observaréis también que duerme mucho más que de costumbre. Controlad, cuando detectéis el aumento de sueño, si vuestro gato come normalmente o se halla inapetente.
La falta brusca de apetito es una muestra clara de que el gato no se encuentra bien. En estas circunstancias conviene que beba suficiente agua.
Si el gato también se niega a beberla, id con premura al veterinario porque son dos malas señales. Cuando un gato se ha envenenado no se atreve ni a comer ni a beber, tal es el tremendo dolor que siente en su estómago.
2. Descarta que tenga fiebre
Si el gato tiene fiebre, normalmente tendrá el hocico seco y caliente. Con un termómetro se le debe tomar la temperatura anal. Debe irse con mucho cuidado, ya que no suele gustarles la maniobra y pueden revolverse y morder.
La temperatura debe oscilar entre los 37,5º y los 39º. Si supera los 39º su estado será febril y deberás llevar al gato al veterinario. Es muy posible que tenga alguna infección. Cuando el gato tiene fiebre su manto pierde brillo.
Descubre en ExpertoAnimal todos los síntomas y el tratamiento para un gato con fiebre, pudiendo aplicar los primeros auxilios si fuese necesario.
3. Observa su orina y heces
Controlar la frecuencia con la cual orina tu gato es importante, ya que podría tener algún tipo de problema renal o de vejiga. Otro factor muy importante es si el gato orina fuera de su arena, siendo algo inhabitual esta conducta. Cuando esto sucede suele significar que tiene problemas en orinar y te lo muestra de forma patente. Puede ser señal de problemas renales. Acude al veterinario.
Cuando sospechas que tu gato no se encuentra bien, debes observar sus heces para dilucidar si son normales, o existe alguna cosa inhabitual. Si observas que tiene diarrea o manchas de sangre, acude al veterinario. Si constatas que tu gato no ha defecado, estate atento. Si está más de dos días sin defecar, acude al veterinario, ya que puede tratarse de una obstrucción intestinal.
4. ¿Tiene nauseas?
Si observas que tu gato tiene nauseas, no te asustes. Los gatos suelen purgarse, y para ello regurgitan en algunas ocasiones. Sin embargo, en ocasiones tienen nauseas secas, o sea que no vomitan nada. Esto es preocupante, ya que puede tratarse de una obstrucción estomacal o esofágica. Debéis acudir al veterinario.
Si vuestro gato vomita varias veces durante un día o dos, debéis ir sin dilación al veterinario, ya que puede tratarse de una intoxicación o una infección del tracto intestinal. Incluso puede tratarse de un problema renal.
5. ¿Ronronea fuerte?
Si vuestro gato ronronea de forma muy ruidosa es síntoma de que no se encuentra bien, y desea comunicároslo para que lo ayudéis. También pueden realizarlo mediante maullidos de aflicción, pero esto es más propio de razas muy vocales, como por ejemplo los siameses.
Cuando esto ocurra, palpad con suavidad todo el cuerpo del gato en busca de inflamaciones, bultos o heridas. Tomadle la temperatura y acudid al veterinario para que lo explore.
6. Revisa si su aliento es anómalo
Si vuestro gato tiene un aliento fétido, puede tratarse de problemas renales, o dentales. Conviene que el veterinario lo revise. Si su aliento es afrutado es muy mala señal, ya que puede ser que vuestro gato padezca diabetes. El veterinario deberá tratarlo y recomendar una dieta idónea.
7. ¿Bebe agua en exceso o tiene inapetencia de ella?
Si observáis que vuestro gato bebe agua de forma desmesurada, llevadlo al veterinario. Puede ser señal de padecer diabetes, alguna dolencia renal, o incluso otra patología grave.
Si de forma súbita vuestro gato pierde el apetito, controla su evolución. No permitas que pase más de 2 días sin alimentarse. Llévalo al veterinario, pueden tratarse de multitud de dolencias.
8. Observa si tu gato se rasca mucho
Si el gato se rasca mucho es señal clara de que tiene parásitos. Las pulgas son lo más frecuente pero también existen muchos otros parásitos externos como garrapatas, ácaros.
Vale más prevenir que curar. A partir de la primavera es conveniente proteger mediante un collar antiparásitos o pipeta a vuestro felino. Si no lo desparasitáis completamente puede llenaros la casa de pulgas. A las pulgas también les gusta vuestra sangre así que debéis actuar rápido. Visita nuestros remedios caseros para desparasitar gatos y olvídate del problema de forma natural. No obstante, si la situación es grave deberéis acudir al veterinario para que os ayude.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Cómo saber si mi gato está enfermo?, te recomendamos que entres en nuestra sección de Primeros auxilios.
Lo que tienes que saber
Para mantener a tu peludo amigo siempre saludable, deberás ser capaz de entender las pequeñas señales de advertencia que pueden significar que esté enfermo. Para ello es importante interactuar con él para que sepas bien cuáles son sus hábitos y rutinas. Es recomendable, por ello ,el mantener a los gatos en casa para poder controlar sus actividades y así haya menor riesgo de exposición a enfermedades.
La ausencia de noticias siempre son buenas noticias. Si los hábitos de tu gato no varían puedes estar seguro de que tu felino está en un buen estado de salud. En cuanto notes algún cambio por mínimo que sea, es motivo de preocupación.
Si notas algún cambio en la actividad, el apetito, el peso, su comportamiento, frecuencia de uso de su arenero, tiempo de sueño, consistencia y olor de heces y orina, frecuencia respiratoria, sonido de su maullido y cambio de olor deberías tener un poco más de atención.
Señales de advertencia que pueden significar que tu gato esté enfermo
Comer mucho o ayuno: muchos piensan que los gatos que piden comida constantemente son obesos, pero eso no necesariamente es cierto. Si tu gato está en una dieta regular y comienza a comer más o a comer menos de lo habitual, debes poner atención.
El hipertiroidismo y la diabetes en felinos son a menudo acompañadas por un exceso de apetito. Si por el contrario notas una disminución en el consumo de alimentos, puede deberse a problemas dentales, disfunciones renales o hasta cáncer. Por regla general, si tu mascota no prueba alimento ni bebe en 24 horas, debes llevarlo al veterinario.
Falta de estética: en caso de que no lo hayas notado, a tu felino le gusta estar limpio. Este tipo de mascotas son animales extremadamente limpios. Suelen limpiarse antes y después de comer, antes y después de acostarse y muchas veces cuando los acariciamos. Si notas que tu mascota se asea menos de lo normal o no lo hace en absoluto, puede ser por algún problema en su dentadura o por artritis.
Mal aliento: si bien es cierto que un felino jamás tendrá un aliento fresco, si notas un aliento muy desagradable puede indicar problemas renales o enfermedades dentales. Ahora bien, si notas un aliento frutal o dulce es un signo de diabetes.
Actividad anormal en su caja de arena: limpiar regularmente el arenero del felino nos puede dar la oportunidad de controlar su salud. Los cambios en la frecuencia de uso, así como el color, olor, textura o cantidad de los residuos de tu mascota, deben ser notificados inmediatamente a su veterinario. Por otro lado, si notas que se está esforzando mucho al usar su caja u orina y defeca fuera de ella puede significar alguna infección en vías urinarias o alguna obstrucción en las mismas.
Sonidos extraños: si tu felino «habla» contigo más de lo normal o se vuelve de pronto muy tranquilo puede ser debido a alguna enfermedad. La ansiedad, la presión arterial alta o el hipertiroidismo son posibles motivos en un cambio en la vocalización felina.
Demasiada o poca actividad: los niveles en la actividad varían normalmente con respecto a la edad del felino. Si estos cambios son muy bruscos es una señal de advertencia. Si notas demasiada actividad en un gato de mediana edad puede deberse a su tiroides. Si por otro lado tu mascota se mueve poco o no le estimula ni jugar ni acercarse, puede indicar artritis u otras cuestiones.
Cambios en el sueño: esto es difícil de identificar pues los gatos duermen mucho y no nos encontramos siempre en casa para controlar sus horas de sueño, pero si notas que cuando él acostumbraba estar despierto ahora duerme o pasa toda la noche vagando, puede haber una causa subyacente.
Apego: si tu felino suele ser muy mimoso y de pronto se aleja o por el contrario, si es un huraño y se vuelve muy cariñoso son signos sutiles de una posible enfermedad.
¿Quieres saber más sobre los gatos?
Te recordamos que este artículo es puramente de carácter informativo. En Curio Sfera .com no tenemos la potestad de realizar diagnósticos ni recetar ningún tratamiento veterinario. En caso de que tu gato tenga cualquier síntoma, te recomendamos que acudas al veterinario de inmediato.
Si quieres ver otros artículos parecidos a Cómo saber si mi gato está enfermo te invitamos a pasarte por nuestra categoría de mascotas. Así mismo, si lo prefieres puedes hacer tus preguntas sobre gatos directamente en siguiente buscador. Y recuerda, si te ha gustado o sido de utilidad, compártelo con tus familiares, amistades o en las redes sociales. También nos puedes dejar un comentario. 🙂