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Cómo decirle a tu hijo que su mascota ha muerto

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Si la muerte fue trágica e inesperada es posible que tu hijo tenga muchas preguntas.

Agencia
Ciudad de México.- El duelo por una mascota muy querida puede ser difícil para los niños, incluso más que la muerte de un pariente lejano, por eso es importante acompañarles y estar allí para ellos mientras superan su dolor. Estos consejos pueden ayudarte a salir adelante juntos.

Sé honesta, aunque no quieras verlo sufrir, es mejor explicarle lo que pasó de forma clara y no mentir o disfrazar la verdad para no verle llorar, tarde o temprano se enterará y podría enojarse contigo o herir la confianza que te tiene. Si se trata de un niño pequeño, no uses frases como “se fue a dormir” o “se fue al cielo”, pues podría tomarlo de forma literal, confundirse o tener miedos nocturnos.

Si es una mascota anciana o enferma prepáralo con anticipación para que pueda despedirse. Un estudio publicado por Environmental Education Research encontró que, como los adultos, los niños procesan mejor la muerte de una mascota cuando tienen tiempo de prepararse. Explícale que el veterinario hizo todo lo posible para curar a tu mascota o que por su edad, es mejor ayudarle a morir sin dolor y en paz, y si sientes que tiene la suficiente madurez y lo desea, permítele estar presente cuando lo inyecten.

Si la muerte fue trágica e inesperada es posible que tu hijo tenga muchas preguntas y el duelo sea más intenso, podría sentirse frustrado, enojado o culpable si no cumplió con todos los deberes para cuidar a su mascota. Hablen de sus sentimientos si quiere hacerlo, deja que vea que tú también estás triste y cuéntale de mascotas que tuviste cuando eras niña y cómo fue para ti perderlas. Responde sus preguntas con claridad, la forma en que te pregunta sus dudas te dará la pauta para saber cuánta información darle, de acuerdo a su edad.

También es útil hacer un proyecto de despedida, como un collage de fotos, plantar un árbol en su honor, hacerle una carta o reunirse a platicar sobre lo que tu mascota significaba para cada uno y recordar sus mejores travesuras o momentos. Déjale claro a tu hijo que el dolor pasará con el tiempo, pero que los buenos recuerdos se quedarán con él.

Cuando sientas que es el momento adecuado, piensa en llevar a casa una nueva mascota, no para sustituir a la mascota que murió, sino como un nuevo amigo con quien compartir amor y aventuras.

La pérdida de una mascota supone muchas cuestiones psicológicas a las cuales debemos enfrentarnos alguna vez en la vida. Cuando una mascota muere en casa, acostumbra a ser el primer contacto que tienen los niños con la muerte, con el proceso de la vida.

Enfrentar la muerte de una mascota supone por parte de nosotros el aceptar la situación, de la misma forma en la que debemos llevar un proceso de duelo, sin embargo ¿qué pasa cuando la mascota que ha muerto es de nuestros hijos?

Uno de los peores errores que podemos cometer como padres es intentar evadir la situación, o reemplazar la mascota muerta por una parecida para evitar que los niños lo noten.

Lo mejor es hacerle frente, ¿pero cómo hacerlo? Hoy queremos dedicar el post para explicarte o darte algunos tips sobre cómo decirle a nuestro hijo que su mascota ha muerto.

¿Cómo decirle a tu hijo que su mascota ha muerto?

Una de las cosas más difíciles para un padre es tener que decirle a su hijo que su mascota ha muerto.
Sin embargo existen formas de ser sinceros y de ayudarle a pasar por el duelo, aquí te contamos cómo:

1. Comunicación: es importante decir la verdad siempre. Si nuestra mascota por ejemplo paso por una enfermedad o una cirugía, es importante decirle al niño lo que ha sucedido, no es correcto mentirle, es ideal mencionarle que como consecuencia de su enfermedad o por la edad, la mascota ha fallecido.

2. Respuestas: es importante al momento de decirle a nuestro hijo que su mascota ha muerto, ofrecerle todo nuestro apoyo, de esta forma el niño tendrá muchas ganas de realizar preguntas, entre las cuales siempre se destaca qué es la muerte y si la mascota volverá.

Para ello debemos ser muy sinceros y explicarle de una forma correcta y clara todas sus preguntas.

3. Tiempo: es importante darle un tiempo al niño para que se acostumbre a la ausencia de la mascota. Se aconseja en estos casos no reemplazar inmediatamente la mascota que ha fallecido, por otra. Es necesario que el niño enfrente la realidad y la pérdida, con el tiempo estará listo para una nueva mascota.

4. Apoyo: decirle a nuestro hijo que su mascota ha muerto, puede ser muy dolorosos, quizás notemos en él comportamientos de tristeza y decaimiento, que son perfectamente normales.

Sin embargo, debemos cuidarnos de que no desarrolle depresión por este suceso. Recordémosle que el dolor que padece por la muerte del animal es completamente normal y que con el tiempo éste irá menguando.

5. El ciclo de la vida: una buena forma de hacer que nuestro hijo lo acepte, es explicándole el ciclo de la vida. Podernos recurrir a la naturaleza o a fotos de la familia, donde mostramos nuestra evolución. Así puede darse cuenta que la muerte es el proceso final y que debemos aceptarlo como algo natural.

Cuando sea el tiempo y veamos que nuestro hijo ha pasado el duelo, podemos entonces llevarlo a comprar o adoptar una nueva mascota, solamente cuando esté recuperado y listo.

Cómo decirle a tu hijo que su mascota ha muerto es un consejo para Temas generales, y habla sobre Temas generales.

Hay que ser claros y sinceros

El momento más duro, sin duda, es decir al niño que su perro, su conejo o su tortuga no van a volver. Aunque la verdad sea triste, debemos contársela con claridad, para no confundirle. Los niños asumen mejor estas experiencias cuando se les dan explicaciones sinceras, adaptadas a su nivel de comprensión, y se les permite expresar su dolor.

Ante este hecho el niño puede mostrar tristeza, ira, negación, culpabilidad o temor. Incluso es posible que se ponga celoso de otros niños que aún tienen a sus animales. También puede expresar su dolor a través de alteraciones en el sueño o en el apetito, aferrarse en exceso a las personas más queridas, mojar la cama, tener pesadillas y volverse muy desobediente. Son manifestaciones que el pequeño superará a base de tiempo, paciencia y cariño.

Algunos padres cuentan “mentiras piadosas” a sus hijos y les dicen que su mascota fallecida “está durmiendo”. A pesar de su buena intención, esto es contraproducente, ya que irse a dormir puede convertirse en algo amenazador que les produzca miedo. Por otro lado, una actitud de espera o de evadir la verdad, diciéndoles por ejemplo que su perrito se ha marchado de viaje o que está en un hospital de animales, no hará más que aumentar el dolor.

Los niños de entre tres y cinco años ven la muerte como algo temporal y potencialmente reversible. Por ello conviene explicarles que cuando un ser vivo muere, deja de moverse, no oye ni ve y no vuelve a despertarse. Tratar de protegerlos con explicaciones inexactas puede crearles ansiedad y desconfianza.

Los niños a menudo hacen preguntas sobre la muerte de su animalito: por qué se ha muerto, si va a volver algún día, a dónde se ha ido. Hay que contestar a todas y cada una de sus cuestiones, aunque nos resulte doloroso, y demostrar a los pequeños que compartimos su sentimiento de pena.

¿Cómo preparar a un niño para la muerte de su mascota?

Cuando tu perro o gato muere, suele conllevar un duro proceso de duelo y en este es posible experimentar emociones de profunda tristeza y dolor. Para ello, y en el caso de que sea posible, lo mejor es prepararte para ese momento. Si tu mascota está pasando por una enfermedad terminal y presenta señales de que puede dejarte en poco tiempo, es tu responsabilidad preparar a los más pequeños de la casa para la muerte de su mascota.

Del mismo modo que los adultos, los niños pueden encajar la noticia de la muerte si se la esperan y están preparados. Para ello, podemos seguir estos pasos:

  • Háblale sobre el estado de salud de tu mascota: lo que puede parecer evidente a tus ojos, es posible que tu hijo no lo termine de entender. Para ello, puedes decirle con mucho tacto que vuestra mascota está enferma y es posible que no le quede mucho tiempo de vida.
  • Habla de la muerte con naturalidad: el ciclo de la vida es un fenómeno natural, puede ser triste y sin duda es un golpe duro, pero para afrontar la pérdida lo mejor es hablar tranquilamente de lo que puede suceder.
  • Disfruta de sus últimos días: en vez de pasar los momentos finales con pena y dolor, podéis intentar disfrutar de su compañía dándole mucho cariño y afecto.

Para preparar a un niño para la muerte de su perro, gato u otra mascota es importante saber si esta va a morir o no, para ello, te recomendamos leer este artículo: 5 síntomas de que un perro se va a morir. En caso de que tu mascota sea un gato, te ofrecemos el siguiente: 5 síntomas de que un gato se va a morir.

De todos modos, si sospechas que vuestro animal de compañía está gravemente enfermo, es primordial acudir a un veterinario para que le examine y ofrezca toda las soluciones posibles.

Ser honestos y sinceros

Ante todo, ser honestos con vuestros hijos y no les apartéis de la realidad con el pretexto de ahorrarles sufrimiento. Aunque os resulte difícil y doloroso hablar de la pérdida de la mascota, mejor hacerlo lo antes posible. Explicarles con un lenguaje sencillo y verdadero que su mascota ha muerto y que ya no volverá jamás: “era muy viejecito y su cuerpo estaba ya muy cansado. Estaba muy enfermo y las medicinas no lo han podido curar, ahora que está muerto ya no tiene dolor”.

Para los niños menores de 3 años, la muerte es como un largo sueño del cual en algún momento se despierta. Por lo tanto, será necesario ser pacientes pues tendréis que explicarle varias veces lo ocurrido y lo que significa la muerte. Para vuestros hijos es muy importante que vayan entendiendo que su mascota se ha ido para siempre y no regresará jamás a jugar con ellos. De lo contrario, pueden quedarse “esperando” se despierte o “regrese” de un largo viaje y con ello aún sufrirán más.

Os recomiendo evitar frases del tipo:

  • Se ha quedado dormido para siempre (porque podríais inducirlos a rechazar dormir por la noche por temor a no despertar)
  • Se ha marchado de viaje (más adelante puede temer ir de viaje)
  • Está muy, muy lejos… en otro lugar maravilloso (porque permanecerán esperando su regreso).

Contestar todas las preguntas

Ante vuestras sencillas y honestas explicaciones surgirán preguntas que yo os animo contestéis sin disfrazar la verdad. Si no tenéis todas las respuestas, no pasa nada, sencillamente les decís que no los sabéis.

Hay preguntas que os pueden mostrar sus temores, por lo que es importante tomarlas en serio e intentar responderlas con sinceridad para ayudarles a calmar sus miedos y aceptar la pérdida. Los temores de los niños pueden ser:

  • ¿Fue culpa mía la muerte? No cariño. Llegó su momento, estaba muy viejo y cansado…
  • ¿Con quién voy a jugar ahora? Con tu perro ya no podrá ser. Pero no estás sólo y puedes jugar con tus hermanos, conmigo, con tu abuelo, etc..
  • ¿Me puedo morir yo también? Si, todos nos moriremos cuando sea nuestro momento.

Los adultos solemos expresar nuestro dolor con tristeza y abatimiento. Los niños, en cambio, expresan su sufrimiento por la pérdia con cambios de humor, menos interés en las tareas o rutinas escolares, cambios con el apetito, un dormir más intranquilo.

Compartir vuestros sentimientos

No es malo que los niños vean vuestro dolor y la tristeza. No hay que angustiarse porque os vean tristes o llorando, al contrario, esto hará que ellos se sientan más acompañados y se den cuenta de que sus sentimientos también son compartidos por vosotros.

Si ellos ven que vosotros intentáis esconder y disimular vuestros sentimientos, aprenderán pronto a no expresarlos y se sentirán solos con su dolor. Permitid quevuestros hijos lloren cuanto necesiten, al igual que vosotros seguro también.

Si hacéis un ritual de entierro es bueno que vuestros hijos participen, pues tomar parte de estos actos les ayuda a ir comprendiendo qué es la muerte y a iniciar mejor su propio proceso de duelo.

¿Tenemos otro perro?

No es aconsejable reemplazar al animal muerto enseguida: el niño debe pasar triste unos cuantos días, es normal que eche de menos a su perro, a su gato. y que se aflija al pensar que ya no va a volver a disfrutar de su compañía. Necesita un tiempo para “elaborar” la pérdida. Si durante este proceso se siente comprendido, acompañado, protegido y apoyado, irá encontrando la forma de enfrentarse sana y positivamente a su dolor y de aceptar la despedida.

En cualquier caso, ten en cuenta que él mismo dirá cuándo se encuentra con ganas para comenzar a crear otra relación de cariño duradero e incondicional con una nueva mascota.

¿Cómo comunicar a un niño la muerte de una mascota?

A pesar de que muchos padres prefieren ocultar la verdad e incluso inventarse una elaborada fábula para explicar a sus hijos que no verán más a su mascota, es importante saber que este no es el modo de explicar la muerte de un animal a un niño/a. A continuación, te ofrecemos los consejos más eficaces desde las teorías de la psicología:

1. Sinceridad ante todo

Es muy importante no decir mentiras del estilo "se ha escapado lejos" o "lo han adoptado otras personas" para evitar que el niño se ponga triste o viva un proceso de duelo.

A pesar de ser algo muy doloroso, la muerte es un fenómeno real, que ocurre en nuestro presente y al que nuestros hijos tendrán que enfrentarse tarde o temprano. Si queremos saber cómo explicarle a un niño la muerte de su mascota, es primordial buscar un lugar íntimo, el momento adecuado y hablarle desde la sinceridad. Además, siendo sinceros, damos la oportunidad al niño de que pase por su propia fase de aceptación y despedida de su mascota.

2. Expresa tus sentimientos

Es posible que el niño o la niña no exprese sus sentimientos correctamente porque no sabe cómo afrontar la pérdida. Si no es capaz de ver cómo te sientes, puede llegar a deducir que estar triste es malo o que no es la manera de vivir una pérdida.

Llorar, sentir pena y dolor no es algo intrínsecamente negativo, es un modo de expresarnos cuando algo malo nos ocurre. Además, al contar cómo te sientes, el pequeño se sentirá comprendido y estrechará lazos contigo.

5. No lo compenses con otra mascota

Muchos padres también optan por adoptar un perrito, gato u cualquier otro animal para suplantar la pérdida causada por la muerte de su mascota. Esta opción no solo es poco efectiva si no que, además, comporta tratar a los animales como meros objetosintercambiables. Si tu mascota ha muerto, es importante pasar por el proceso de duelo pertinente, comunicar al niño la muerte de su perro o gato y volver a adoptar cuando realmente sea el momento adecuado para ello.

Psicología infantil: el proceso de duelo cuando muere una mascota

Es posible que esta noticia sea el primer contacto del niño con el concepto de la muerte y todo lo que conlleva. El proceso de duelo infantil se vive de una manera distinta que el mismo proceso en adultos. La doctora Abigail Marks, psicóloga especializada en el duelo infantil, nos cuenta que el dolor de un niño es más oscilante: la tristeza le puede durar un rato, llora unos minutos, vuelve a jugar y puede ponerse a llorar al minuto siguiente.

Un estudio realizado por Joshua Russell en 2016 descubrió que los más pequeños describen la pérdida de su mascota como uno de losmomentos más dolorosos que recuerdan. Sin embargo, ese mismo estudio reveló que los niños y niñas son capaces de racionalizar la muerte de su compañero animal de una manera eficaz y mediante la inteligencia emocional.

Con esta información, resulta más sencillo entender el duelo infantil. Si bien es cierto que debes permanecer cerca del pequeño y mostrarle que siempre estarás ahí cuando pida ayuda, como padre/madre o tutor/a, es importante que le des el espacio que el niño necesita para expresarse hasta que pase un cierto tiempo. Si ves que los síntomas de tristeza duran más de lo que se pensaba en un principio, es posible que el niño esté pasando por un duelo patológico. En este caso, la terapia psicológica puede ser una solución efectiva.

¿Qué hacer cuando muere nuestra mascota?

La pérdida de un animal querido es un golpe duro para toda la familia. Es muy probable que haya formado parte de recuerdos y momentos muy bonitos y emotivos transformándose, así, en un miembro más de tu núcleo familiar.

Tu responsabilidad como persona adulta en este caso será comunicar al niño la muerte de su mascota, mostrarle la naturalidad de este momento y el hecho de que no es nada malo sentir tristeza y dolor temporalmente para superar una fase. A pesar de ser doloroso, es importante mantenerse unidos y aceptar la pérdida de vuestra mascota de la mejor manera posible. Si el niño ve que, como persona de referencia, aceptas la pérdida y sigues adelante, es muy probable que lo viva de un modo parecido. Además, esta experiencia le servirá como herramienta de superación para futuras pérdidas o vivencias parecidas.

En definitiva, la pérdida de un animal es un momento duro y muy triste. Sin embargo, si aprendes a explicarle a un niño la muerte de su perro, gato u otro animal, no solo le estarás dando un aprendizaje vital muy importante si no que, a su vez, estarás aprendiendo a ser un poco más fuerte y a aceptar este tipo de experiencias.

Por otro lado, es importante llamar al registro en el que se encuentre inscrito el animal para comunicar el suceso. Para más información, consulta el artículo "Qué debo hacer si mi perro se muere" si tu fiel compañero es un can.

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