A muchos dueños les encanta compartir la comida con su perro. Además, se acerca a la mesa y pone carita y es difícil negarle nada. Pero hay que tener en cuenta que hay ciertos alimentos, que aunque a los humanos nos sienten bien o incluso sean especialmente beneficiosos para nosotros, no tienen que ser buenos para el perro.
Especies distintas comen alimentos diferentes, y para empezar, los perros son carnívoros, por lo que algunas frutas y verduras son tóxicas para tu perro.
Mientras tu mascota se encuentre en la etapa de crecimiento, es mejor atenerse a la dieta que recomiende el veterinario y evitar darle de comer comida de la mesa.
Durante la etapa adulta del perro, se pueden incorporar frutas y verduras en pequeñas cantidades, como premios o aperitivos. Como a partir de los 7 años necesitan una mayor cantidad de fibra en su dieta, lo mejor es consultar con el veterinario sobre la incorporación de frutas y verduras a su día a día.
Es importante tener en cuenta que además de las frutas y verduras tóxicas para los perros, hay otros que pueden ocasionar alergias o intolerancias individuales, por lo que siempre se debe estar muy atento al introducir una fruta nueva en la dieta del perro.
2. Cebollas y ajos
Y demás familia, como por ejemplo los puerros, las cebolletas, etc… Estos alimentos son peligrosos para los perros en dosis altas o repetitivas, puesto que contienen tiosulfato, que puede destruir los glóbulos de la sangre canina y causarles anemia. Esta hortaliza también puede ocasionar letargo, taquicardia, hiperventilación, encías pálidas y en casos graves, colapso respiratorio.
En realidad la cereza no es peligrosa para el perro, la pulpa es jugosa y quita la sed. Lo que es peligroso es el hueso, porque contiene cianuro y si se lo traga puede provocar insuficiencia respiratoria o muerte en el can.
El hueso del albaricoque tiene el mismo problema, por lo que también hay que tener cuidado cuando se le den estos frutos al animal.
4. Hongos o setas
Al igual que ocurre con los humanos, algunos hongos o setas son tóxicos para los perros, por lo que es necesario mantener vigilado a tu mascota al pasear por el campo para que no coma hongos o setas.
Las setas no identificadas pueden ocasionar un fallo multiorgánico en cuestión de horas. Si te das cuenta de que tu perro puede haber ingerido un hongo desconocido, no dudes en llevarlo al veterinario, preferiblemente con un ejemplar de la seta que pienses que haya ingerido, o de todas las setas que haya alrededor.
6. Patata verde
Esto es, la patata que no ha madurado del todo o la patata cruda que tenga brotes verdes. Estas patatas contienen solanina que pueden causarle náuseas, vómitos y convulsiones y posteriormente problemas de corazón. Este alcaloide desaparece al cocinar las patatas, así que es perfectamente aceptable darle al perro patatas fritas (de bolsa mejor no) o cocidas.
La solanina también se encuentra en las plantas de patata, así que no le dejes corretear por un huerto o le permitas estar cerca de una planta de patata y sácalo de la cocina cuando hagas tortilla.
7. Ruibarbo
El ruibarbo es un tubérculo que se usa sobre todo en repostería, pero en realidad en España no se come demasiado, así que no hay mucho problema. En los perros acaba con los niveles de calcio y puede derivar en un fallo renal.
La manzana en si no es mala para los perros, la pulpa les sienta muy bien, pero las pepitas contienen cianuro, por lo que pueden ocasionar una insuficiencia respiratoria o incluso la muerte.
10. Aguacate
El aguacate es indigesto para los perros porque contiene persina, que es una sustancia fungicida (que mata hongos y mohos) que es tóxica para varias especies de animales, como los perros, gatos, caballos y algunas aves. La persina está presente en las hojas, fruto y semillas de aguacate, por lo que tampoco se debe dejar a los perros cerca de un aguacatero.